Mil seiscientos millones de euros. Esa es la cantidad aproximada que se va a mover en España durante la semana del black friday. Si consideramos que un 60% de esa cantidad se utilizará para adquirir productos que los consumidores realmente no necesitan (creo que me quedo corto en realidad), nos queda la poco depreciable cantidad de novecientos sesenta millones de euros.
Con esa cantidad de dinero se podría, por poner algunos ejemplos,
¿Por qué?, ¿por qué los españoles entramos en la rueda de un consumismo que no teníamos en la mente anteayer, como quien dice? No soy capaz de entender que una nación como la nuestra, asfixiada por el paro, por la corrupción y por la inestabilidad, en una palabra, se suba a un carro innecesario para el día a día de la mayoría de sus individuos.
Reflexionemos. Guardemos una parte, una pequeña parte de ese dinero. Usémoslo para otras cosas. Donémoslo. Si te parece que no es tan reseñable, haz el ejercicio de sumar a esa cantidad otras parecidas en navidad, día del padre, ciber monday, reyes magos, día de la madre… ¿seguimos?
Más cultura. Más libros por favor.